Fractura del instrumento endodóntico. 5ª lección de la serie de conferencias sobre preparación endodóntica.
En: Lopes et al. Fractura de instrumentos endodónticos. Recomendaciones clínicas. Rev. bras. odontol., Rio de Janeiro, v. 68, n. 2, p. 152-6, jul./dez. 2011 Introducción
La resistencia a la fractura es una de las principales propiedades mecánicas de los instrumentos endodónticos que debe ser informada al usuario para orientarlo en la práctica clínica. Durante la preparación químico-mecánica de un conducto radicular, los instrumentos de endodoncia sufren tensiones extremadamente adversas que varían con la anatomía del conducto, las dimensiones de los instrumentos y la habilidad del profesional. Estas tensiones adversas modifican continuamente la resistencia a la torsión y a la flexión rotacional de los instrumentos endodónticos durante la instrumentación de un conducto radicular. La fractura de los instrumentos puede producirse por torsión, flexión rotatoria (esfuerzos de tracción y compresión) y combinaciones de los mismos. Fractura de los Instrumentos por Torsión Para que ocurra la fractura por torsión es necesario que la punta del instrumento endodóntico esté inmovilizada y en la otra extremidad (mango) se aplique un torque superior al límite de resistencia a la fractura del instrumento.
Puede producirse en instrumentos endodónticos de acero inoxidable y NiTi, accionados manualmente o mediante dispositivos mecanizados. Si la punta del instrumento no se inmoviliza durante la instrumentación de un conducto radicular, independientemente del valor del torque aplicado, no se producirá la fractura por torsión del instrumento endodóntico. El torque (T) puede definirse como el efecto rotatorio creado por una fuerza (F) distante del eje de rotación de un objeto. Se calcula mediante la ecuación: Torque = F.R donde, R (radio) es la distancia entre el punto de aplicación de la fuerza (F) y el eje de rotación del objeto. La fuerza en el Sistema Internacional de Unidades se expresa en Newton (N) y el par se expresa por la unidad de fuerza multiplicada por la unidad de longitud del radio (newton x metro). Las unidades utilizadas para la fuerza son también el kilogramo (kgf) y el gramo (gf) y para la longitud el centímetro y el milímetro.
Existen las relaciones entre las unidades: 1 kgf = 1000 gf = 9,807 N 1 cm = 10 mm Recomendaciones Clínicas Inmovilización de la Punta del Instrumento Cuando la punta de un instrumento endodóntico es inmovilizada dentro de un conducto radicular y la rotación es hacia la derecha, habrá una deformación plástica inicial (distorsión) de sus hélices. La presencia de deformación plástica de las hélices observada al retirar el instrumento endodóntico de un conducto radicular durante la instrumentación, da la alerta de que una fractura por torsión es inminente. Por lo tanto, durante la instrumentación de un conducto radicular, es importante que el profesional retire el instrumento del interior del conducto con mayor frecuencia y lo examine cuidadosamente. Los instrumentos de endodoncia deformados deben desecharse antes de que se produzca el fallo (fractura).
La deformación plástica también permite al profesional realizar correcciones y ajustes en el avance del instrumento dentro del conducto y en el torque a ser aplicado en un nuevo instrumento utilizado en la instrumentación del conducto radicular. Estas medidas tienen como objetivo evitar la inmovilización y la deformación plástica del nuevo instrumento endodóntico utilizado en la instrumentación. La inmovilización de un instrumento endodóntico operado manualmente o mediante dispositivos mecánicos (motores) dentro de un conducto radicular puede minimizarse reduciendo la carga y el avance del instrumento en dirección apical. La acción de corte de los instrumentos endodónticos mediante el movimiento de ensanchamiento (alternativo o continuo) se realiza avanzando el instrumento de 1 a 3 mm en dirección apical del conducto radicular, intercalando retiradas.
Los avances superiores aumentan la superficie de contacto y la resistencia al corte de la pared dentinaria, lo que puede provocar la inmovilización total o parcial de la punta del instrumento e inducir una carga superior a su límite de resistencia a la fractura por torsión. En el caso de los instrumentos de accionamiento manual, el avance se controla mediante el ángulo de giro a la derecha aplicado al mango del instrumento endodóntico. Para los instrumentos de diámetro pequeño, el ángulo de rotación hacia la derecha no debe ser superior a 45°. Para instrumentos de mayor diámetro, el ángulo de rotación puede variar de 90 a 120º. Cuanto menor sea el ángulo de rotación aplicado al mango del instrumento endodóntico, menor será su avance dentro del conducto radicular. También hay que señalar que el avance de un instrumento dentro de un conducto radicular depende del ángulo de inclinación de la hélice del instrumento. Cuanto menor sea el ángulo, mayor será el avance. Fractura de un instrumento endodóntico.